Conjur 07/12/2017
Pocos meses después de que cortes estadounidenses hubiesen concluido que la decisión de la corte de Ecuador que condenó a Chevron a pagar casi US$ 10.000 millones por daños ambientales en 2011, fue corrompida por “soborno, coerción y fraude”, el Tribunal Superior de Justicia (STJ por sus siglas en portugüés) brasileño negó la petición de homologación de la sentencia ecuatoriana.
De acuerdo con la Corte Especial del tribunal, Chevron Corporation es una compañía estadounidense que no tiene una dirección válida en Brasil, y su subsidiaria -Chevron Brasil- es una persona jurídica distinta. Por eso y por no identificar conexión entre la demanda ecuatoriana y el Estado brasileño, los jueces negaron la petición de homolgación de la sentencia de la Justicia de Ecuador que condenó a Chevron Corporation.
En la petición de homologación de la sentencia extranjera, los demandantes alegaron que la exploración petrolífera realizada por Texaco, después incorporada a Chevron, en Ecuador provocó la contaminación de aguas subterráneas, cursos de agua y zonas forestales.
Según los demandantes, aunque tenga su sede en Estados Unidos, la corporación petrolera también ejercería sus actividades en territorio brasileño, por ejemplo el Campo de Frade, en Río de Janeiro, lo que justificaría que la sentencia fuera aprobada por el STJ para que pudiera ser homologada en Brasil.
El STJ, sin embargo, siguió el mismo camino de la Justicia de Canadá, que en enero de este año rechazó un intento de ejecutar la sentencia ecuatoriana contra Chevron Canada Limited, subsidiaria canadiense de Chevron Corporation. La corte concluyó que Chevron Canada es una entidad separada de Chevron Corporation y no hace parte de la demanda ecuatoriana. Y, por lo tanto, no es deudora de la sentencia.
Conexión concreta
En el análisis de la demanda de más de 24 mil hojas, el juez Luis Felipe Salomão destacó que, para la aprobación de homologación de sentencias extranjeras, es imprescindible la existencia de algún punto de conexión entre el país y el caso concreto sometido al mismo, de manera que se verifique la posibilidad de entrada en la jurisdicción nacional.
En el caso analizado, el juez ponente señaló que no se localizaron direcciones válidas para la citación de Chevron Corporation en Brasil y, por consiguiente, la citación fue realizada a través de carta rogatoria en territorio estadounidense.
“Resuena, pues, inequívoco que Chevron Corporation no se encuentra localizada en Brasil y que la pretensión pediculada oblicuamente en este hecho es direccionar la ejecución a Chevron Brasil Petróleo Ltda., que se presenta como mera sociedad subsidiaria indirecta de la entonces requerida, supuestamente en séptimo grado”, destacó Salomão al recordar que las sociedades subsidiarias son entidades jurídicas con personalidad y patrimonio propios, no susceptibles de responsabilidad por débitos imputados a otra sociedad del mismo grupo económico.
Cargos criminales
Además de entender que no existe razón para la presentación de una demanda de intento de homologación en Brasil, el juez Salomão recordó que, según declarado por el Ministerio Público Federal, existen decisiones del Poder Judicial de Estados Unidos que señalan a la ocurrencia de corrupción en el juicio de la justicia ecuatoriana, entre otros graves cargos criminales.
A la luz del concepto de orden público, el juez entendió que la corrupción judicial llega a las bases del debido proceso legal y, en ese contexto, Brasil asumió compromisos internacionales de combate a la corrupción, cuyo incumplimiento tiene el poder de violar el orden público nacional e internacional.
“La homologación aquí solicitada pondría en riesgo las buenas costumbres y el orden público, sea porque reverenciaría el proceso judicial sobre el cual pesan sospechas fundadas de ilegalidad, sea porque colocaría al Poder Judicial brasileño en ruta de colisión con convenciones internacionales de las cuáles nuestra República es signataria”, concluyó el juez al negar la solicitud de homologación. Con información de la Asesoría de Prensa del STJ.
Esta es una traducción no oficial realizada por Chevron. El artículo original en portugués puede ser visto aquí.
Fuente OriginalNotas relacionadas