Times Herald Online 01/10/2015
Una carta al editor publicada recientemente (19 de septiembre, Michael J. Haworth, “Anywhere but Chevron [En cualquier lugar excepto Chevron]”) incluyó información inexacta y engañosa sobre un fraudulento juicio contra Chevron Corporation en Ecuador.
Los hechos en el caso son claros: Se inició una demanda contra Chevron Corporation en Ecuador en 2003, alegando que la compañía era responsable de una serie de problemas ambientales y sociales en la Amazonía ecuatoriana. Incapaces de producir cualquier evidencia para sustentar sus acusaciones, los demandantes, liderados por el abogado litigante estadounidense Steven Donziger, recurrieron al fraude, sobornando jueces y funcionarios judiciales, fabricaron pruebas e incluso redactaron la sentencia de manera clandestina a cambio de un soborno de $500.000. Para encubrir su conducta ilícita, Donziger pagó a celebridades y grupos de activistas ambientales para que apoyaran y promovieran el juicio en los medios de comunicación.
El año pasado, una corte federal de los EE.UU. dictaminó en un documento de 500 páginas que Donziger y sus socios violaron las leyes federales contra el crimen organizado, cometiendo soborno, manipulación de testigos, lavado de dinero, obstrucción de la justicia y fraude electrónico para la obtención de la sentencia ecuatoriana contra Chevron. El tribunal consideró que la sentencia ecuatoriana fue producto de fraude, concluyendo que era inejecutable en los Estados Unidos.
Como lo resumió la corte federal de Estados Unidos en su decisión, "No se hace justicia imponiendo injusticia". Las acciones malintencionadas del Sr. Donziger y sus asociados sólo socavan los propósitos de quienes usan medios legítimos para promover el estado de derecho, los derechos humanos y la responsabilidad ambiental.
— David A. Samson/gerente general de Asuntos Públicos
Chevron Corporation
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