Caso Chevron

Actualización del Caso Chevron: Oh Canadá

National Review - Jack Fowler 11/09/2015

La Corte Suprema de Canadá la semana pasada determinó que la demanda por 17.000 millones de dólares, entablada en contra del gigante petrolero Chevron (a través de su predecesora Texaco) por demandantes ecuatorianos, quienes aducen que la compañía habría causado severos daños ambientales por supuestamente haber realizado una muy pobre remediación de los sitios de perforación petrolera, puede ser conocida en Ontario.

Según un reportaje del New York Times, en Canadá los ecuatorianos están luchando por incautar los activos de una subsidiaria de Chevron. Chevron argumentó que no debía permitirse a los ecuatorianos cobrar su deuda en Canadá puesto que no tienen ningún vínculo directo con el país. La Corte canadiense dio la razón a los ecuatorianos a la vez que sostuvo que las cortes locales estaban obligadas a respetar las decisiones de sus contrapartes extranjeras.

“Las cortes canadienses, como muchas otras, han adoptado un enfoque liberal y generoso respecto del reconocimiento y ejecución de las sentencias extranjeras”, sentenció la Corte Suprema. “Para reconocer y ejecutar tal sentencia, el único prerrequisito es que la corte extranjera haya tenido una conexión real y substancial con los litigantes o con el objeto de la controversia.”

Alan Lenczer, el principal abogado canadiense que representa a los demandantes ecuatorianos, dijo que la decisión “abre el camino” para un juicio por a demanda.

“Es necesario que puedan cobrar su @@sentencia@@ en alguna parte y eso es lo que la corte está diciendo”. Añadió, sin embargo, que “aún tenemos un camino por recorrer”.

Este columnista en numerosas ocasiones ha escrito sobre esta burda estafa izquierdosa, instigada por el desacreditado abogado neoyorquino Steven Donziger, descrito por Paul Barret en su aclamado libro La Ley de la Selva (Law of the Jungle) (se recomienda leer la reseña de Kevin Williamson quien ha publicado numerosos comentarios sobre este fraudulento caso). Sin embargo, uno tiene que admitir lo que es obvio: los estafadores al más puro estilo Rasputín y los esbirros que gobiernan el Ecuador han logrado otro día ante las cortes.

Pero es solo eso, otro día ante las cortes. La @@sentencia@@ de la Corte Canadiense se pronunció exclusivamente respecto de la jurisdicción, más no sobre los méritos de la demanda o las acusaciones en contra de Chevron (un anunciante en el National Review).

El establecimiento de la jurisdicción no quiere decir que los demandantes necesariamente tendrán éxito en hacer que la @@sentencia@@ ecuatoriana sea reconocida y ejecutada. Una determinación de jurisdicción no es otra cosa que otorgar a los demandantes la oportunidad de buscar el reconocimiento y la ejecución de la @@sentencia@@ ecuatoriana. Una vez que se ha sobrepasado la etapa jurisdiccional, Chevron y Chevron Canadá podrán utilizar todos los elementos procesales a su alcance para tratar de desechar las acusaciones de los demandantes.

Por lo tanto, si ponemos las cosas en perspectiva, hay algunas cosas que vale la pena recordar sobre este caso:

- Un juez federal en los Estados Unidos dictaminó que el caso en contra de Chevron era el resultado de fraude, corrupción y asociación ilícita para delinquir.

- Los muchos golpes que los abogados izquierdistas y sus aliados ecuatorianos han recibido en estos últimos años, han hecho que muchos de sus numerosos financistas (¡pobre Patton Boggs!), expertos y codefensores se retiren del caso.

- El único lugar en el que los demandantes han podido tener éxito en toda esta estafa, ha sido ante el manipulado sistema legal ecuatoriano.

Ah, sí, y este:

- La @@sentencia@@ de la Corte canadiense se emitió al día siguiente de que un antiguo aliado de Donziger, H5, la firma californiana especializada en sistemas de investigación en línea y servicios de litigación, se volviera en su contra y llegara a un acuerdo con Chevron (reporte de HotAir).

Esta es una traducción no oficial realizada por Chevron. El artículo original puede ser visto aquí.

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