Diario Correo Perú 10/04/2015
El gobierno de Rafael Correa le miente a su gente. Cree que imponiendo sobretasas arancelarias y prohibiciones de importación defiende a la economía ecuatoriana.
Él como economista doctorado en la Universidad de Illinois (Urbana-Champaign) debería saber que eso no es cierto.
Lamentablemente, su pacto político con el empresariado hace que defienda intereses de corto plazo a costa del bienestar de su población. Poco o nada podrán hacer los mil nuevos agentes aduaneros contratados para evitar el contrabando.
Veamos. Se han impuesto sobretasas a los productos importados, en promedio del 45%. Esto hace que la carne de res tenga un 65% de mayor costo para el consumidor, la cebolla perla 70%, platas 70%, manzanas/peras 62%, limón 70%, durazno 70%, leche evaporada 99%, hongos/champiñones 70%, conservas de hortalizas. La canasta de consumo se ha encarecido y se ha causado un problema dentro del Pacto Andino.
La inflación del 2013 fue 2.7%, la del 2014 alrededor del 3.67% al año; siendo la inflación de la canasta de consumo de alrededor del 27.74%, ubicándose el costo de la canasta básica en los $646.3 mientras el ingreso familiar mensual con 1.6 perceptores es de $634,67.
Las finanzas públicas no cuadran en un país miembro de la OPEC que vende petróleo a menos de $50 el barril y que solo consigue crédito internacional de los chinos y los iraníes.
El déficit fiscal del 2012 fue del 1.09%, el del 2013 del orden del 4.73%, el del 2014 no se ha publicado y se prevé un déficit para el 2015 del orden del 6%. Las cuentas aprietan.
La demagogia tiene patas cortas. Con la caída de Maduro en Venezuela, la Kirchner en Argentina, la Rousseff en Brasil; solo le quedaría en la región Evo Morales en Bolivia y Daniel Ortega en Nicaragua como amigos. Los amigos van muriendo o la corrupción los ha carcomido. ¿No es cierto, Ollanta?
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