“Los eventos que dieron lugar a este caso de desacato criminal marcan el último capítulo de una extensa saga legal, que abarca varios continentes y más de veinticinco años de feroz litigio, entre el acusado Steven Donziger y Chevron Corporation CVX -1.1% ("Chevron") con respecto a contaminación por hidrocarburos en la región oriental de la Amazonia ecuatoriana. Este caso, sin embargo, no tiene nada que ver con el debate sobre cualquier responsabilidad que pueda tener Chevron por esa contaminación. Sin embargo, este caso no es menos importante para una sociedad, como la nuestra, que tiene el imperio de la ley entre sus virtudes cardinales. De hecho, lo que aquí está en juego es el principio fundamental de que una parte en una acción legal debe acatar las órdenes judiciales o correr el riesgo de sufrir sanciones penales, sin importar cuán fervientemente crea en la rectitud de su causa o cuánto deteste a su adversario”.

“Mediante una orden para mostrar causa de fecha 30 de julio de 2019 (la"Orden de demostración de causa"), el juez Lewis A. Kaplan acusó al Sr. Donziger de seis cargos de desacato penal derivados de la negativa del Sr. Donziger a cumplir con múltiples órdenes judiciales en Chevron Corp. v. Donziger... Al desafiar repetida y deliberadamente las órdenes del juez Kaplan, eso es precisamente lo que hizo Donziger. Es hora de pagar las consecuencias. Debido a que los Fiscales Especiales han probado cada elemento de desacato criminal de una orden judicial más allá de toda duda razonable, la Corte determina y dicta un veredicto de CULPABILIDAD en cada uno de los seis cargos de desacato criminal acusados en la Orden para demostrar causa... Contrariamente a la afirmación del Sr. Donziger de que su condena fue "preordenada", el Tribunal lo declara culpable en cada cargo por una razón y solo una razón: Donziger hizo lo que se le acusa”.

Steven Donziger ya ha sido inhabilitado por su connivencia con otros para comprar una gigantesca sentencia ecuatoriana contra Chevron, como se ha detallado en muchas columnas anteriores. En 2014, un juez federal en Manhattan descubrió que él y otros habían conspirado para fabricar pruebas y le impidió hacer cumplir la sentencia y cobrar más de 550 millones de dólares en honorarios legales. Ahora está condenado penalmente por desafiar las órdenes judiciales de, entre otras cosas, entregar pruebas en esa demanda de extorsión y ceder a Chevron sus derechos sobre los honorarios. El gigante petrolero se ha involucrado en una exitosa y extremadamente costosa lucha de una década para defenderse del fraude y evitar que la sentencia ecuatoriana sea aceptada en otros lugares.

Pronto se dictará sentencia y el Sr. Donziger podría recibir hasta seis meses de prisión. Pero no creo que esa sentencia vaya a imponerse (o deba). Sin duda, se tendrá en cuenta el largo arresto domiciliario de Donziger (que se extendió mucho más por las repetidas solicitudes de aplazamiento de su propio abogado...). Quizás una sentencia no privativa de libertad (libertad condicional) le dé a este ex abogado su mejor oportunidad de redención.

Michael I. Krauss

Profesor de derecho. Escribe sobre ilícitos civiles extracontractuales, ética legal y política exterior

Esta es una traducción no oficial realizada por Chevron. El artículo original en inglés puede ser visto aquí