Perspectiva Chevron

El Oriente

La manipulación de indígenas ecuatorianos ha sido parte del fraude contra Chevron

Los abogados detrás del fraude contra Chevron en Ecuador, Steven Donziger y Pablo Fajardo, han utilizado a indígenas ecuatorianos como parte de su estrategia para enriquecerse ilícitamente.

Juicio Crudo 31/03/2022

La manipulación de indígenas ecuatorianos ha sido parte del fraude contra Chevron

La manipulación de indígenas ecuatorianos ha sido parte del fraude contra Chevron

Los abogados detrás del fraude contra Chevron en Ecuador, Steven Donziger y Pablo Fajardo, han utilizado a indígenas ecuatorianos como parte de su estrategia para enriquecerse ilícitamente.

Los engañaron para que firmaran la demanda, los instruyeron en cómo mentir para promover el fraude en una película, e incluso se inventaron una nacionalidad indígena que nunca existió.

Probablemente han escuchado el nombre de María Aguinda, indígena kichwa. Ella es la principal demandante contra Chevron en Ecuador. El juicio lleva su nombre: Aguinda versus Chevron.

En una toma no utilizada de la película ‘Crudo’, en 2007, Aguinda explica cómo fue engañada con una falsa promesa de recibir medicinas gratis a cambio de firmar la demanda contra la empresa.

En esta misma película, Donziger engaña en cámara a Ermenegildo Criollo, indígena cofán, sobre qué decir en una reunión de accionistas de la empresa en Estados Unidos.

Le manifiesta al productor de la película, en idioma inglés, para que Criollo no entienda: “Tienes que controlar a este tipo y ponerlo rápido al día. En serio, porque ahorita, no creo que él – él esté captando”.

Vale recordar que, en 2017, Donziger fue declarado “persona no grata” por las propias comunidades amazónicas que él dice representar. Además, fue enjuiciado por los huaoranis.

Por su parte, Fajardo llegó al extremo de manifestar que “los tetetes y sansahuaris se extinguieron por completo en los primeros años de operación de Texaco en la Amazonía”.  Sus declaraciones falsas han quedado al descubierto.

Estudios antropológicos, como el escrito por Robert Wasserstrom, Susan Reider y Rommel Lara, señalan que ya para los años 50 los tetetes casi habían desaparecido debido al boom cauchero y a la guerra con otros grupos indígenas. Esto es décadas antes de la explotación petrolera en el nororiente ecuatoriano.

Pero si las afirmaciones sobre los tetetes son disparatadas y distan de la realidad, las hechas sobre los sansahuaris caen en lo ridículo. Según los estudios, los sansahuaris jamás existieron.

A estos extremos han llegado Fajardo y Donziger en su afán de enriquecerse a costa de la población ecuatoriana.