El exjuez Alberto Guerra en su testimonio en abril ante el tribunal que ve la demanda de arbitraje entablada por Chevron en contra de la República del Ecuador, explicó lo que sabía sobre la corrupción judicial perpetrada por el abogado estadounidense Steven Donziger y sus colaboradores en el juicio de Lago Agrio. Guerra, que fue el primer juez del caso, también participó en dichas ilegalidades que incluyeron intentos de coordinar con el último juez del juicio de Lago Agrio, Nicolás Zambrano, la solicitud de sobornos relacionados con la emisión de la sentencia definitiva.
Guerra y Zambrano tenían un arreglo en el que Guerra estaría encargado de redactar de manera clandestina las providencias de los casos civiles que manejaba Zambrano, a cambio de un pago mensual de aproximadamente $1.000. Guerra redactó secretamente unos 100 dictámenes a nombre de Zambrano, cuyos borradores fueron encontrados en la computadora de Guerra. A cambio, Zambrano le pagó distintas cifras, generalmente en efectivo y en algunas ocasiones a través de depósitos directos en la cuenta bancaria de Guerra. Los estados de cuenta, papeletas de depósito y la agenda de Guerra corroboran su testimonio. Guerra declaró que por lo general entregaba personalmente copias de los borradores de las providencias a Zambrano en el aeropuerto de Quito, o en su defecto enviaba los documentos o las USB que contenían borradores ya sea a Zambrano o a un tercero que servía de intermediario (a pedido de Zambrano) vía TAME, la línea aérea estatal. Los registros de envío de TAME corroboran la existencia de numerosos envíos hechos por Guerra a Zambrano y a terceros que servían de intermediarios.
En relación al caso de Chevron en particular, Guerra declaró haber llegado a un acuerdo por separado con los representantes de los demandantes de Lago Agrio, a través del cual acordaron pagarle $1.000 mensuales, a cambio de dictámenes que ayudarían impulsar el caso a su favor. Durante el primer período que Zambrano estuvo a cargo del caso Chevron, Guerra redactó de manera clandestina por lo menos nueve providencias, cuyos borradores fueron encontrados en su computadora. En su declaración, proporcionó detalles de varios de estos dictámenes, demostrando así su profundo conocimiento de los mismos. Los representantes de los demandantes generalmente pagaban a Guerra en persona y en efectivo, pero en ocasiones hicieron depósitos directos en su cuenta bancaria. Los estados de cuenta y las papeletas de depósito confirman su testimonio.
En relación a la sentencia de Lago Agrio, Guerra declaró que Zambrano le pidió solicitar un soborno a los demandantes de Lago Agrio a cambio de permitirles redactar la sentencia. Guerra se reunió con Donziger, su colega ecuatoriano Pablo Fajardo y el representante de los demandantes, Luis Yanza, en el restaurante Honey & Honey en Quito y les presentó esta propuesta que fue rechazada por los tres. Cuando Guerra informó a Zambrano del resultado de su reunión, Zambrano le informó que había llegado a un acuerdo por separado con los demandantes, en virtud del cual los demandantes redactarían la sentencia a cambio de un soborno de $500.000 a ser pagado de lo que se obtuviera luego de la ejecución de la sentencia.
Guerra declaró que unas dos o tres semanas antes de la emisión de la sentencia de Lago Agrio, Fajardo entregó a Zambrano un borrador de ésta y pidieron a Guerra revisar y editarlo. Guerra permaneció el fin de semana en Lago Agrio editando y revisando la sentencia en una computadora que le entregó Fajardo. Dado que Guerra tenía algunas preguntas, Fajardo le dio una Ayuda Memoria para facilitarle la edición de la sentencia. Guerra encontró que dicha Ayuda Memoria no le servía para la edición de la sentencia; finalmente ninguno de los cambios hechos por Guerra, y explicados en su declaración, se incluyeron en la sentencia final.
Guerra redactó de manera secreta los dictámenes en los casos civiles a cargo de Zambrano
- Guerra declaró haber redactado más de 100 dictámenes a nombre de Zambrano, los mismos que fueron encontrados en la computadora que Guerra mantenía en su casa. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 4, Tr. 739:1-13).
- “Hasta donde puedo recordar, en la medida en la que recuerdo, no existe evidencia que pruebe la existencia de pagos por exactamente $1.000, pero por otras sumas sí. En el caso específico de febrero de 2012, cuando Zambrano hizo un depósito de $2.000 a mi favor”. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 3, Tr. 632:23-633:2).
- Los estados de cuenta bancarios de Guerra corroboran la existencia de depósitos hechos por Zambrano directamente en la cuenta de Guerra en el Banco del Pichincha. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 3, Tr. 635:25-636:7; Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 4, Tr. 878:22-879:20; 887:20-888:18).
- Guerra declaró que Zambrano generalmente le pagaba en efectivo. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 3, Tr. 632:7-10; Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 4, Tr. 878:16-21; 887:5-12).
Guerra y Zambrano enviaron el material redactado de manera clandestina vía TAME.
- Los registros de envío de TAME pertenecientes a Guerra muestran que tanto él como Zambrano en ocasiones intercambiaban los documentos y dictámenes redactados de manera clandestina a través de esta línea aérea. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 3, Tr. 647:10-17)
- Guerra confirmó que los paquetes eran identificados como “documentos” puesto que de otra manera se podría revelar la existencia de un plan secreto y fraudulento. “Se debe entender que no podía ir a las oficinas de TAME y proporcionar un detalle pormenorizado de lo que estaba enviando. No podía decir estoy enviando dictamen para el caso 2020 de A vs. B. Lo único que dije es que se estaban enviando documentos”. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 3, Tr. 668:25-669:4).
El testimonio de Guerra durante la audiencia en relación a los nueve dictámenes en el caso Chevron que fueron redactados secretamente por Guerra a nombre de Zambrano, dejan en claro que Guerra redactó tales dictámenes. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 4, Tr. 863-877)
- Guerra trabajaría en la redacción de un dictamen en un día específico; sin embargo, haría aparecer como si dicho dictamen hubiese sido redactado pocos días después para beneficio de Zambrano, a fin de que no cometiera un error en la inclusión de la fecha al emitir el documento. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 4, Tr. 868:14-869:6)
- El juez explicó que también dejó espacios en blanco en los borradores de los dictámenes para que Zambrano los llenara, además de haber hecho anotaciones en el texto para asegurarse de que Zambrano no olvidaría llenar dichos espacios en blanco. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 4, Tr. 871:8-872:21).
- Guerra también redactó providencias, al menos en parte, a fin de impulsar el proceso a favor de los demandantes. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 4, Tr. 876:1-6).
- “Lo que puedo asegurarle es que todos estos documentos [nueve dictámenes], sin excepción alguna, incluyendo aquellos en los que trabajé en Lago Agrio, fueron utilizados por Zambrano para el caso Chevron”. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 3, Tr. 665:15-18).
- “Pregunta: ¿Reafirma y confirma que usted, Alberto Guerra, redactó todos los dictámenes que fueron encontrados en su computadora y que voluntariamente proporcionó a Chevron? Respuesta: Sí señor.” (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 4, Tr. 877:10-14).
Los registros de envío de TAME muestran que Guerra hizo varios envíos a Zambrano durante el período en el que presidió el caso Chevron, a través de intermediarios como Narcisa León o Fernando Albán.
- “Envié estos dictámenes a Zambrano a través de terceros porque eso fue lo que él me pidió”. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 3, Tr. 657:13-14; Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 4, Tr. 886:7-9).
- Guerra explicó que habían trabajado de esa manera porque Zambrano fue “muy cuidadoso y muy posesivo con estas cosas”. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 4, Tr. 881:8-16).
- Guerra además declaró que el primer envío durante el primer período en el que Zambrano presidió el caso, definitivamente incluyó el dictamen del caso Chevron que redactó dos días antes de esta fecha. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 4, Tr. 882:3-883:13).
Los demandantes de Lago Agrio pagaron a Guerra para que redactara de manera clandestina los dictámenes en el caso Chevron.
- Guerra declaró que los demandantes le pagaron $1.000 mensuales para que redactara de manera clandestina los dictámenes para impulsar el caso a favor de los demandantes. “Mi acuerdo con ellos [los demandantes] fue recibir $1.000 mensuales mientras ayudaba en la preparación de las providencias”. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 3, Tr. 675:17-19; véase id. en 675-678 relativo a los pagos hechos por los demandantes al Sr. Guerra).
A nombre de Zambrano, Guerra se reunió con el equipo legal de los demandantes en el restaurante Honey & Honey para solicitar un soborno a cambio de permitirles redactar la sentencia.
- Guerra describió su reunión, a nombre de Zambrano, con Fajardo, Donziger y Yanza en el restaurante Honey & Honey en Quito y declaró que les había ofrecido permitirles redactar la sentencia a cambio de por lo menos $500.000. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 3, Tr. 600:7-601:8).
Guerra editó un borrador de la sentencia preparado por los demandantes de Lago Agrio.
- Guerra declaró que Pablo Fajardo le entregó a Zambrano un borrador de la sentencia de Lago Agrio, que a su vez Zambrano pidió a Guerra revisar y editar. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 3, Tr. 601:9-17).
- “Pregunta. ¿Estoy en lo correcto al decir que en su testimonio afirma que el juez Zambrano permitió a los demandantes de Lago Agrio redactar la sentencia de Lago Agrio? Respuesta: Usted está en lo cierto”. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 3, Tr. 625:1-4).
- Guerra declaró que durante un fin de semana, a fines de enero y principios de febrero de 2011, editó un borrador de la sentencia en el departamento de Zambrano en Lago Agrio, en una computadora que le fuera provista por Fajardo. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 4, Tr. 786:15-18)
- Guerra declaró acerca de algunas de las ediciones específicas que hiciera en la sentencia y cómo sus ediciones no fueron incorporadas en la sentencia final. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 4, Tr. 841:2-10; 843:11-844:14).
Guerra solicitó y recibió una Ayuda Memoria de Pablo Fajardo.
- Guerra además declaró que pidió a Fajardo ayuda sobre ciertos temas relacionados con actuaciones en el caso de Lago Agrio y que Fajardo le proporcionó una Ayuda Memoria. (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 3, Tr. 751:24-752:9, 754:6-12; (Pista 2 Transcripción de la Audiencia, Día 4, Tr. 777:19-778:14).