Forbes 09/07/2019
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Los defensores de la sentencia de US$9.500 millones de dólares obtenida fraudulentamente contra Chevron Corporation por Steven Donziger (abogado suspendido y condenado por chantaje) y sus aliados ecuatorianos tenían uno de los últimos resabios de esperanza en Canadá. Las decisiones anteriores de las cortes canadienses habían echado por tierra esencialmente cualquier posibilidad de cobro de la sentencia ecuatoriana contra Chevron Canada, una entidad separada. Sí es cierto que el caso no había sido desestimado legalmente, aunque quienes siguen esta columna sabían que la campana canadiense sonaría pronto.
Recordemos: como Chevron Corporation nunca tuvo activos en Ecuador, los demandantes intentaron ejecutar la sentencia ecuatoriana en otras jurisdicciones. En la acción planteada en Canadá, Donziger y sus asociados intentaron ejecutar la sentencia ecuatoriana tanto contra Chevron Corporation, que no cuenta con activos en Canadá, y contra Chevron Canada Limited, que no era parte del juicio ecuatoriano. En abril, la Corte Suprema de Canadá rechazó una petición de los demandantes para revisar una decisión de la Corte de Apelaciones de Ontario que sostiene que la sentencia ecuatoriana contra Chevron Corporation no puede ejecutarse contra Chevron Canada Limited. Con esa decisión a los demandantes no les quedó más que tratar de hacer valer la demanda contra el propio Chevron. Tal como lo manifestamos, era inevitable que la demanda fuera abandonada.
Los abogados de Chevron habían pedido que se la desestimara planteando que cualquier esfuerzo adicional para continuar con ella implicaría abusar del sistema legal de Canadá, derrochar sus recursos judiciales e ir contra el derecho internacional. Hoy les escribo para informarles que los abogados de los demandantes ecuatorianos han mordido el anzuelo. El 5 de julio aceptaron la desestimación incondicional y permanente de Yaiguaje v. Chevron Corporation et al. Y lo que es más importante, han acordado pagar a Chevron los costos judiciales asociados con el caso. Se emitió una orden judicial ratificando legalmente este acuerdo. Aquí está el enlace a la orden.
Esto cierra el caso en Canadá, salvo, por supuesto, en lo que respecta al cálculo de los costos que se adeudan a Chevron. Los esfuerzos para ejecutar la sentencia fraudulenta en Brasil, Argentina, Gibraltar, los Estados Unidos y mediante tribunales internacionales también han sido derrotados. Solo en Ecuador la sentencia tiene efecto legal y, como se mencionó anteriormente, Chevron no tiene activos allí.
¿Seguirá Steven Donziger vendiendo acciones de su futuro “resarcimiento”?
Esta es una traducción no oficial realizada por Chevron. El artículo original en inglés puede ser visto aquí
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